Yo digo… me senté en la mesa de al lado y comencé a inventarle una vida, una casa, un carro, una manera de hablar y de pensar, una historia donde yo me sintiera como pez en el agua. Y es que como dice Hernán Casciari: “Las historias son, a veces, lo que nosotros queremos que sean”
martes, 10 de febrero de 2009
“El misterio de Olegario y los bachacos culones”. (recuperado)
jueves 25 de octubre de 2007
“…Podría ser que me amó o que, incluso, me sigue amando con locura, y que alguna tara familiar y hereditaria le impidió y le sigue impidiendo hacer algo al respecto.”
2 comentarios:
Conchale chica fijate que puede ser y todo... ahora tiene más sentido la cosa.
Sí, mucho más sentido mi Pebbles, es mejor creer eso. Me encanta la frase, y el libro es buenísimo, te lo recomiendo ;-)
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